Los países insulares exigen un nuevo objetivo de financiación climática para salvar su futuro ante el cambio climático.
Bakú, Azerbaiyán – 10 de noviembre de 2024. En la víspera de la crucial COP29, los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID) intensifican su llamado por un cambio transformador en la financiación climática global. La Alianza de los Pequeños Estados Insulares (AOSIS) destaca que la supervivencia de estas naciones está en juego y pide un objetivo de financiación climática ambicioso y específico para mitigar los efectos del cambio climático, limitando el calentamiento global a 1,5 °C.
Los líderes de la AOSIS, liderados por la embajadora Fatumanava Dra. Pa’olelei Luteru, subrayan que la propuesta de Nueva Finanzas Colectivas Cuantificadas (NCQG) debe garantizar financiamiento nuevo, adicional y predecible, destinado a la adaptación, mitigación y reparaciones por daños ya ocurridos debido al cambio climático.
En un contexto donde los impactos climáticos ya están devastando estas naciones insulares, el NCQG es visto como la clave para salvar sus ecosistemas y poblaciones vulnerables.
“Lograr el límite de 1,5 °C es más que una cuestión de supervivencia, es una necesidad para un futuro sostenible globalmente”, advirtió Luteru, quien insistió en que la financiación debe ser una prioridad, separada de otros flujos internacionales como la ayuda oficial para el desarrollo (AOD). Los PEID también exigen una asignación mínima de fondos y que la financiación sea concesional para facilitar la adaptación y la reparación de pérdidas y daños.
Con el tiempo corriendo en contra y los desafíos climáticos cada vez más apremiantes, los PEID instan a la COP29 a tomar decisiones audaces para asegurar un futuro viable para las pequeñas islas del mundo y, de paso, para el planeta entero.