Ahora resulta que el ministro actual, dice estar enfrentando la problemática de la Bahía de Luperón, pero lo hace de manera desacertada.
El Ministerio de Medioambiente y Recursos Naturales es un ministerio infuncional, puede afirmarse que su primer ministro, tuvo en su haber la responsabilidad de montar laestructura operativa del mismo, y lo consiguió gracia a asistencia extranjera, principalmente europea y, particularmente alemana. Después, el letargo ha sido la característica base de este ministerio porque a partir de 2004, emergieron los intereses en pugna en torno a los recursos naturales renovables, el sector de la construcción ha sido el más letal porque los gobiernos desarrollistas son los primeros en facilitar la extracción de agregados de los ríos y de las playas de manera impune. A raíz de ello, sectores dentro y fuera del Estado, han tomado como excusa las obras públicas para extraer agregados delos ríos para su comercialización en el mercado nacional y en el mercado internacional.
Es decir, las obras públicas constituyen el parapente a partir del cual los ríos y las dunas pasan a ser tristes recuerdos en el imaginario nacional. El asunto queda facilitado por la permisología. Así, el actual ministro del MARENA, es el ministro que mayor cantidad de permisos ha concedido en menor tiempo. Lo que implica que la política oficial en materia ambiental consiste en la explotación sin límites de los recursos naturales no renovables, particularmente la extracción de agregados desde las cuencas hidrográficas del país.
Ahora resulta que el ministro actual, dice estar enfrentando la problemática de la Bahía de Luperón, pero lo hace de manera desacertada. Esto así porque olvida que, nada puede hacer si no lo hace integrando al ayuntamiento del lugar. Es decir, la educación ambiental del cabildo concernido debe ser su primer paso, porque la gestión del ministro en la zona,se ve taladrada por la información oficial y oficiosa que nutre al ayuntamiento, sin la colaboración y asistencia del gobierno local, la acción del ministerio resulta frustratoria. Esto así, porque quien está sobre el terreno, luego de una capacitación adecuada sobre el valor de la política pública ambiental, es el que puede ayudar al ministro a cumplir la ley sectorial puesto sobre sus hombros.
Resulta que, por ejemplo, el tema del manglar en la Bahía de Luperón, es el resultado de promesas de campaña de todo el que llega a Alcalde en este municipio. Esto es: las viviendas o asentamientos humanos más frágiles de este cabildo son las existentes en el mangle y en la zona de amortiguamiento de la referida bahía. De modo que el problema nace en el cabildo, por tanto, quien ha creado el problema es el más indicado para resolverlo con asistencia del órgano pertinente del gobierno central. Ahora el asentamiento humano allí implantado por la inobservancia de sus funciones tanto del ministerio ambiental como del a municipalidad, son quienes deben resolverlo de manera conjunta con un plan integral que implique la reubicación del asiento humano y un plan piloto para el lugar. Otro tanto ocurre con la extracción de agregados del río Bajabonico, los síndicos de los municipios de Imbert hasta Luperón junto a los distritos municipales de la zona, facilitan la extracción de agregados de dicho río porque constituye una entrada de dinero para esos cabildos,como para el propio MARENA por intermedio de la permisología, por tanto, todos se hacen los suecos en lugar de afrontar el problema.
Los daños a la agricultura, a la ganadería, a los asentamientos humanos y al ambiente que esta política oportunista genera, la pagarán con creces las venideras generaciones. Allí todo mundo sabe quién es el que extrae agregados, se sabe también cual es funcionario del actual gobierno, por tanto, goza de total impunidad. Gracias a las falencias del sistema de Administración de justicia provincial y al nacional. El ministerio público ambiental lo sabe pero, se ve incapacitado de actuar por el principio tradicional entre nosotros de obediencia al poder, el cual opera en violación a las disposiciones del código penal y a la ley ambiental gracias a la ausencia de independencia de la administración de justicia. Esos permisos son ilegales y no hacen más que comprometer tanto la responsabilidad administrativa de las instituciones involucradas como la responsabilidad personal de los funcionarios involucrados dentro y fuera de la estructura del Estado.
Dicho de otra manera, es una burda mentira hablar de ministerio público independiente en el presente gobierno, claro, en el pasado, ministros ambientales han sido benevolentes otorgando permisos incluso para la quema indiscriminadas de bosques en la zona, la actual gestión se lleva la palma en ello. Pero esto no justifica la lenidad actual, puesto que, se dijo, que el actual gobierno sería diferente, que traería cambio para mejor, no para peor como viene ocurriendo.
Realmente, la política ambiental del cabildo es inexistente y, pudiera ocurrir que esté signada por la ignorancia más aviesa pero, al mismo tiempo, el ministerio público se hace de la vista gorda y el ministerio hace publicidad con lo del mangle mientras en sus narices se depredan bosques, se extrae madera y se deja al río Bajabonico sin agregados. Es decir, se lo convierte en una fangosa laguna muerta por ausencia de un plan integrador sobre su preservación.
Esto así, porque la policía nacional, el ejército y la armada,tampoco actúan allí, se sabe que, no muy lejos de allí, la entrada de ilegales por vía marítima es rutinaria y nada pasa. A pesar de que todas las estructuras del Estado están informadas, de las violaciones a la ley que allí ocurren. Recientemente, la prensa denunció que unos trescientos ilegales impidieron a pescadores dominicanos pescar en aguas territoriales dominicanas. Dicho de otra manera, el Estado dominicano es inexistentes en zonas apartadas donde la prensa no llega o es difusa. Tal y como pudo ver el país en el tema de la montaña depredada en Monte Cristi.Precisamente, por un encumbrado dirigente político del partido de gobierno.
Como en las mejores dictaduras, quien opina y dice la verdad, es descalificado con simplemente argumentar que se trata de un desafecto al gobierno, de un opositor, entonces ¿cómo puede la ciudadanía cooperar con un gobierno que castiga las buenas acciones y premia las inconductas? El tema da para mucho pero, no basta con que se tenga una página de supuesto gobierno digital cuando, materialmente, se puede comprobar que ya no solo el papel lo aguanta todo, lo hace también la red digital. En sendos casos, la conclusión es la misma, tenemos un gobierno integrado por funcionarios indolentes más inclinados a obtener beneficios personales desde posiciones públicas que reales servidores públicos.
- Recuérdese que, más de una vez, se ha derrumbado el turismo o, mejor dicho, el desarrollo turístico del Puerto Plata Oeste y de toda la provincia, precisamente, por la lenidad oficial en la zona. Al parecer, la historia va a repetirse nueva vez, porque no hay la integridad de lugar para resolver un problema que afecta a toda la nación.
La riqueza histórico-cultural de la zona y la diversidad biológica allí existente, requieren de autoridades responsables y, al parecer, se carece de ellas. Allí deberíanhaber planes de reforestación y de protección de especies,acompañada de una vigilancia cierta sobre los desmontes que allí ocurren sin que autoridad alguna intervenga. El MARENA no puede afirmar que carece de información porque las denuncias, las demandas de Imbert a Luperón llenan sus anaqueles sin que se den por enterados.
No somos conscientes de que la desertificación y el agotamiento de recursos naturales renovables y no renovables, avanza a pasos de gigantes desde Haití hacia Quisqueya. DLH-19-11-2024