El gobierno busca frenar el monopolio digital de google chrome
El Departamento de Justicia de EE. UU. ha solicitado al juez Amit Mehta que Google sea obligado a desprenderse de Chrome, su navegador insignia, que controla el 61% del mercado estadounidense. Esta acción forma parte de un esfuerzo por frenar las prácticas antimonopolio que, según el Gobierno, consolidan el dominio de Google en la industria tecnológica.
Además de deshacerse de Chrome, los funcionarios antimonopolio han propuesto requisitos de licencia de datos y regulaciones sobre inteligencia artificial y el sistema operativo Android.
Aunque inicialmente se discutió la posibilidad de obligar a Google a vender Android, esta medida no fue incluida en las solicitudes actuales.
Google se defiende y acusa al gobierno de dañar la innovación
Lee-Anne Mulholland, vicepresidenta de Asuntos Regulatorios de Google, calificó las acciones del Departamento de Justicia como una "agenda radical".
Advirtió que estas decisiones podrían perjudicar a los consumidores y desarrolladores y afectar el liderazgo tecnológico estadounidense en un momento crucial para la innovación global.
Remedios propuestos: cortar la influencia de google en sus productos
Entre las medidas planteadas por los demandantes destacan:
- Limitar el uso de Chrome, Play y Android para favorecer la búsqueda de Google.
- Restringir contratos y herramientas que controlen o influencien los canales de distribución.
- Implementar soluciones estructurales que eviten el uso de la escala publicitaria y el control sobre datos.
Estas propuestas buscan desmontar el ecosistema integrado de Google que, según el Gobierno, ahoga la competencia y perpetúa su hegemonía en la publicidad y las búsquedas en línea.
Un caso histórico que define el futuro de la tecnología global
El juez Amit Mehta ha programado una audiencia de dos semanas en abril de 2025 para analizar los cambios propuestos. El veredicto final, que podría redibujar el panorama tecnológico mundial, se espera para agosto de 2025.
Este caso pone en juego no solo el futuro de Google, sino también el equilibrio de poder en una industria que define cómo el mundo accede a la información. Con datos de Europa Press.