Las acusaciones por crímenes de guerra incluye al jefe del ala militar de Hamás}
El Tribunal Penal Internacional (TPI) ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant. Las acusaciones incluyen crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, relacionados con la devastadora ofensiva militar en la Franja de Gaza.
La corte de La Haya argumenta que Netanyahu y Gallant buscaron intencionalmente dejar sin recursos básicos a la población gazatí, bloqueando la entrada de ayuda y obstaculizando organizaciones humanitarias.
Los jueces señalan que esta estrategia implicó asesinatos, persecución y ataques indiscriminados, categorizados como crímenes contra la humanidad.
Líderes de hamás también enfrentan severas acusaciones internacionales
El TPI también ordenó la detención de Mohamed Diab al Masri, jefe del ala militar de Hamás. Entre las acusaciones figuran asesinato, tortura y violencia sexual, vinculadas a los ataques del 7 de octubre de 2023, que dejaron 1,200 muertos y 240 secuestrados.
Otros líderes de Hamás, Yahya Sinwar e Ismail Haniye, ya han sido declarados muertos en operaciones israelíes.
Desafíos para ejecutar las órdenes judiciales
Aunque el TPI busca justicia, Israel no reconoce su autoridad, al igual que Estados Unidos. Netanyahu podría evitar ser arrestado al no visitar países firmantes del Estatuto de Roma, una estrategia similar a la empleada por Vladimir Putin, otro líder con órdenes de arresto vigentes.
El caso Netanyahu no solo expone las tensiones entre justicia internacional y soberanía nacional, sino que podría redefinir las relaciones diplomáticas y los movimientos políticos en Oriente Medio y más allá. La comunidad internacional observa atentamente si estas órdenes de arresto marcarán un precedente o quedarán como un desafío sin ejecutar. Con datos de Europa Press.