Condenas de 30 y 20 años por secuestro y extorsión con violencia y criptomonedas
Una sentencia histórica fue dictada contra tres ciudadanos rusos que perpetraron un secuestro violento contra un compatriota en Bávaro, Republica Dominicana exigiendo millones en rescate en pesos dominicanos y criptomonedas.
El Tribunal Colegiado del Distrito Judicial de La Altagracia condenó a 30 años de prisión a Alexander Sergeevich Kopylova y Iatsenko Petr Alekasandrovlch, mientras que la esposa de este último, Inna Iatsenko (Inexa), recibió una condena de 20 años.
La víctima, cuyo nombre ha sido reservado para proteger su identidad, fue sometida a un calvario de violencia física y psicológica, mientras los secuestradores buscaban lucrarse a cualquier costo.
Un secuestro calculado y grabado para extorsionar
El secuestro ocurrió el 3 de septiembre de 2022, cuando la víctima salió de su residencia hacia una pizzería en la avenida Barceló, Bávaro. Allí, los procesados lo interceptaron y lo subieron por la fuerza a un vehículo. Más tarde, regresaron al lugar para robar el auto de la víctima, extendiendo su acto criminal.
Lo más escalofriante llegó después: grabaciones impactantes enviadas a través de redes sociales, donde los secuestradores golpeaban brutalmente a su compatriota y exigían 5 millones de pesos en monedas rusas, transferidos a una cuenta Bitcoin.
Posteriormente, contactaron a la madre de la hija de la víctima vía WhatsApp, exigiendo 83,240 dólares estadounidenses para liberar al secuestrado, instruyendo la entrega del dinero en un residencial en Bávaro.
Justicia contra un crimen de impacto internacional
El Ministerio Público de La Altagracia presentó un caso sólido, demostrando la culpabilidad de los acusados con pruebas contundentes, desde los vídeos enviados hasta los mensajes de extorsión.
Las condenas buscan enviar un mensaje claro: la República Dominicana no tolerará crímenes internacionales en su territorio.
El uso de criptomonedas en este caso también expone una nueva dimensión del crimen organizado, donde herramientas digitales son utilizadas para dificultar el rastreo y facilitar extorsiones transnacionales.
Un precedente contra el secuestro y la extorsión moderna
Este caso no solo marca un precedente en la lucha contra el secuestro y la extorsión, sino que también evidencia el peligro creciente del uso de plataformas digitales para crímenes complejos.
Con estas condenas ejemplares, la justicia dominicana reafirma su compromiso de proteger la seguridad y la dignidad de sus residentes, enfrentando incluso las amenazas del crimen transnacional.