Tras recibir el doctorado ha dicho "En la música, como en la vida, lo esencial no es la perfección, sino la verdad"
Raphael, el eterno embajador de la música española, ha sido investido este lunes como doctor honoris causa por la Universidad de Jaén. En su discurso, el cantante ha dejado claro que, para él, lo esencial no es la perfección, sino la verdad emocional que se transmite a través de la música. "Un cantante no es solo quien afina", ha dicho, "es un intérprete de emociones, un actor de la voz".
Con su voz como poderosa herramienta, Raphael ha defendido la importancia de transmitir emociones reales. "Cantar no es solo cuestión de notas", ha argumentado, "es de matices, respiros y silencios".
La verdadera magia, según el artista, radica en desafiar las expectativas y mantenerse fiel a uno mismo, resistiendo las modas pasajeras y apostando por la autenticidad.
Una vida dedicada a desafiar y evolucionar constantemente
El artista ha compartido que, a lo largo de su carrera histórica, lo ha impulsado una constante evolución personal y profesional. "Nunca me ha interesado ser solo un cantante", declaró, "siempre he querido ser un intérprete que conmueve, sacude y despierta sentimientos".
Para él, la evolución constante y la perseverancia son claves para mantener viva su ilusión y seguir desafiando los límites de la interpretación.
Raphael: más que un artista, un referente cultural global
El rector de la Universidad de Jaén, Nicolás Ruiz, no pudo ocultar su emoción, calificando el día como "histórico" para la institución y la provincia. Para él, Raphael es un referente, no solo por su música, sino por sus valores de humildad, energía y perseverancia.
A sus 65 años de carrera, con 60 discos y más de 50 millones de copias vendidas, Raphael se confirma como historia viva de la cultura española, un embajador de los valores andaluces en el mundo. Con datos de Europa Press.