El grave cuadro médico de Lula que estremeció a Brasil
Sao Paulo. Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, enfrentó un escenario extremadamente grave antes de ser operado por un traumatismo craneoencefálico derivado de un accidente ocurrido en octubre. Según su médico personal, Roberto Kalil Filho, la situación era tan crítica que sin la intervención quirúrgica de emergencia, "corríamos el riesgo de lo peor".
Lula relató por primera vez cómo ocurrió el incidente. Mientras intentaba guardar un cortaúñas sin levantarse de una banqueta en la residencia oficial, esta se desplomó, provocando un fuerte golpe en la parte trasera de su cabeza.
Aunque inicialmente Lula creyó estar fuera de peligro, comenzó a experimentar dolores de cabeza y movimientos extraños en una pierna, síntomas que ignoró mientras cumplía con su agenda oficial.
Seis días hospitalizado y una intervención urgente
El mandatario estuvo hospitalizado durante seis días, enfrentando complicaciones que incluso lo llevaron a sentirse "preocupado" por su vida. Su última resonancia había indicado una disminución del líquido acumulado en su cerebro, pero los médicos detectaron que la gravedad persistía, obligando a una nueva operación.
"Me equivoqué al pensar que estaba fuera de peligro", confesó Lula, acompañado por la primera dama, Janja da Silva, quien admitió haber temido por la vida de su esposo.
Dudas sobre su futuro político tras la operación
La intervención quirúrgica ha desatado cuestionamientos sobre su capacidad para una posible candidatura presidencial en 2026, dado que Lula cumplirá 81 años ese año.
Sin embargo, el presidente asegura que su decisión dependerá más de la situación política del país que de su estado de salud.
"He prometido cuidarme. Soy responsable y tengo mucha disciplina", afirmó Lula, mientras los médicos han recomendado que regrese a sus actividades habituales de manera paulatina.
Aunque hace un mes declaró estar listo para postularse nuevamente, Lula expresó su deseo de que "hubiera otros candidatos capaces de liderar una renovación política en el país y el mundo", dejando abierta la posibilidad de que esta sea su última gran batalla en la arena política.
La recuperación de Lula no solo es crucial para su salud, sino también para el futuro de Brasil. Con datos de Europa Press.