Onpeco llama a poner barrera contra dumping y monopolio del arroz

Considera necesario proteger el arroz criollo ante amenazas económicas externas

SANTO DOMINGO, D.N. – El arroz dominicano no solo es un alimento, es identidad. Ante la inminente amenaza de la importación libre de aranceles, el Observatorio Nacional para la Protección del Consumidor (ONPECO) hace un llamado urgente a la defensa de la producción nacional de arroz, piedra angular de nuestra cultura y seguridad alimentaria.

La posible entrada de arroz extranjero a precios artificialmente bajos pone en riesgo la autosuficiencia del país, según advierte ONPECO. 

Aunque su costo inicial podría atraer a los consumidores, las consecuencias a largo plazo serían devastadoras: la desaparición de los productores locales, la creación de un monopolio importador y el aumento inevitable de precios controlados por actores externos.

Casos como el de Haití, donde la dependencia de las importaciones arrasó con la producción local, son un claro ejemplo de lo que podría suceder. 

Así, ONPECO advierte que no podemos permitir que un modelo similar desestabilice la economía alimentaria dominicana.

Un llamado a la acción: consumidores como guardianes del arroz nacional

El arroz criollo, reconocido por su calidad superior, color blanco y sabor inigualable, debe seguir siendo el protagonista de nuestra dieta. 

ONPECO señala que un decreto presidencial, aunque bien intencionado, no será suficiente para contrarrestar los efectos de los acuerdos internacionales. 

En cambio, urge una campaña masiva que fomente la fidelidad hacia el arroz nacional, destacando sus beneficios culturales, económicos y sociales.

La economía local depende del éxito del productor criollo

La producción de arroz genera 15 millones de quintales anuales, superando la demanda nacional de 14 millones. 

Esto no solo asegura el suministro interno, sino que también sostiene el progreso en las provincias productoras, donde miles de familias dependen de esta actividad para satisfacer sus necesidades básicas.

La caída de la producción local no solo significaría perder un alimento esencial; también afectaría la estabilidad económica y social de comunidades enteras, acentuando la dependencia externa y exponiéndonos a riesgos de inseguridad alimentaria ante catástrofes o conflictos internacionales.

Monopolio y dumping: el verdadero enemigo del consumidor

Lejos de garantizar alimentos más económicos, el dumping extranjero y la eliminación de aranceles podrían generar un mercado controlado por monopolios, donde los consumidores quedarían atrapados entre precios elevados y una calidad degradada. 

Por ello, ONPECO insiste: el progreso no lo generan los grandes comerciantes, sino los productores y consumidores unidos como aliados estratégicos.

Un plan nacional: proteger el arroz, proteger nuestro futuro

Es hora de que el país se levante como una muralla protectora del arroz nacional. ONPECO insta al Gobierno, al sector privado y a los ciudadanos a unirse en una campaña masiva que garantice el futuro de nuestra producción y resalte la superioridad indiscutible del arroz criollo.

Visto así como lo plantea Onpeco, en la defensa del arroz dominicano no solo está en juego un alimento; está en juego nuestra soberanía alimentaria, nuestra cultura y nuestro desarrollo como nación.