Joel Sosa Polanco enfrenta cargos por narcotráfico y lavado de activos.
Santiago, República Dominicana.- El juez José Rafael D’Asís de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santiago dictó 18 meses de prisión preventiva contra Joel Sosa Polanco, uno de los implicados en la Operación Falcón 2.0. La acción judicial se produce tras una solicitud del Ministerio Público, que ha logrado identificar y capturar a Sosa Polanco como parte de una organización criminal dedicada al narcotráfico y al lavado de activos.
Sosa Polanco, quien también es conocido por los apodos “Psosa”, “Manteca” y “Panano”, es pariente del extraditable Erick Randhiel Mosquea Polanco, líder de la red desmantelada. La estructura operaba bajo una organización de tipo mafioso, similar a las que operan en Italia, y estaba conformada principalmente por miembros de la misma familia, quienes desempeñaban diferentes roles dentro de las actividades ilícitas.
En su intervención, la fiscalía, representada por la directora general de Persecución, Yeni Berenice Reynoso, y el fiscal titular de Santiago, Osvaldo Bonilla, presentó pruebas que demuestran la vinculación de Sosa Polanco con la red criminal. Entre sus funciones, se encuentra la de actuar como testaferro de Mosquea Polanco, utilizando su nombre para registrar vehículos de motor de propiedad del cabecilla, los cuales eran empleados en el tráfico internacional de drogas.
- Además, Sosa Polanco desempeñaba otros roles operativos clave, como la recolección y transporte de sumas monetarias a favor de Mosquea Polanco, cobrando deudas de terceros y redirigiendo los fondos hacia el cabecilla a través de empresas vinculadas a la estructura criminal, como Inversiones Inmobiliarias Mosquea y Polanco, S.R.L. y Inmobiliaria de Jesús, S.R.L.
Según las investigaciones, la organización se infiltró en varios sectores económicos, incluyendo la inmobiliaria, la agricultura, el comercio de vehículos de motor, las bombas de combustible y las joyerías. Sosa Polanco, quien enfrentó cargos por tráfico de drogas, patrocinio del narcotráfico, lavado de activos, entre otros, vivía una lujosa vida en Santiago, con una residencia en una zona exclusiva y vehículos de alta gama, contrastando con su modesto salario como mensajero en una de las inmobiliarias de la organización, donde ganaba apenas $7,000 pesos dominicanos.
El arresto de Sosa Polanco se produjo tras su llegada a suelo dominicano, luego de haber sido detenido en Colombia junto a su primo y líder de la red, Erick Randhiel Mosquea Polanco. Durante el allanamiento de su residencia, las autoridades incautaron municiones, artefactos para fusil M-16, drogas, vehículos y documentos que confirmaron su rol en la red criminal.
El Ministerio Público acusa a Sosa Polanco de violar varios artículos del Código Penal Dominicano, así como diversas leyes relacionadas con el narcotráfico, lavado de activos y control de armas, lo que conlleva sanciones severas por su participación en actividades ilícitas que han perjudicado gravemente al Estado dominicano.