Nuevo líder, Choi Sang Mok, promete estabilidad tras semanas de incertidumbre
Corea del Sur enfrenta una tormenta política sin precedentes. Tres presidentes en un mes han marcado un capítulo de inestabilidad desde la fallida declaración de ley marcial promulgada por el destituido Yoon Suk Yeol.
Ahora, Choi Sang Mok, exministro de Finanzas y vice primer ministro, asume el cargo con el desafío de restaurar la confianza en un país sumido en el desorden.
En su primer discurso como presidente en funciones, Choi pidió disculpas públicas por el caos que afecta al país y prometió un enfoque centrado en la estabilidad política y social.
“Haremos todo lo posible para garantizar que la seguridad nacional, el orden público y la economía permanezcan sólidos,” declaró de axuerdo a untexto xde Europa Press
Destituciones consecutivas y vacíos en el tribunal constitucional
La crisis comenzó con Yoon Suk Yeol, quien intentó implementar la ley marcial, una medida que le costó su destitución. Su sucesor inmediato, Han Duck Soo, tampoco pudo mantenerse en el cargo tras enfrentar críticas por su incapacidad para llenar vacantes críticas en el Tribunal Constitucional.
Choi, quien asumió en medio de esta turbulencia, también enfrenta cuestionamientos por haber participado en una polémica reunión del gabinete que antecedió la declaración de ley marcial. Sin embargo, su mensaje principal es claro: devolver la estabilidad a un país fracturado.
Amenaza externa: tensión con corea del Norte aumenta
La incertidumbre interna ha generado preocupaciones de seguridad. Choi advirtió sobre la posibilidad de que Corea del Norte intente aprovechar la vulnerabilidad política actual para realizar provocaciones.
El ministro de Exteriores, Cho Tae Yul, ha estado en contacto constante con aliados clave como Estados Unidos, Japón y China, asegurando que el país trabaja activamente para evitar que la crisis interna se traduzca en debilidad geopolítica.
Corea del Sur enfrenta un delicado momento en su historia reciente, donde el liderazgo de Choi Sang Mok será crucial para superar los desafíos internos y externos que amenazan la estabilidad nacional.