La decisión la tomó el presidente Steinmeier tras moción de confianza perdida a Olaf Scholz
Alemania atraviesa un momento crucial: tras fracturas internas que desataron la caída del gobierno de coalición, el presidente Frank-Walter Steinmeier ha disuelto el Parlamento y ha convocado elecciones anticipadas para el 23 de febrero de 2025.
Esta decisión sigue al colapso del gobierno tripartito liderado por Olaf Scholz, incapaz de superar las tensiones internas entre socialdemócratas, liberales y ‘verdes’, recoge Europa Press.
El punto de quiebre llegó en noviembre, cuando las discrepancias entre Scholz y el ministro de Finanzas, Christian Lindner, líder del Partido Liberal, derivaron en su salida y la de su partido de la coalición.
El posterior fracaso en la moción de confianza del 15 de diciembre selló el destino del gobierno en el Bundestag.
Conservadores lideran encuestas mientras la ultraderecha gana terreno
Los sondeos actuales perfilan un panorama desafiante para Alemania. La Unión Demócrata Cristiana (CDU), encabezada por Friedrich Merz, lidera las intenciones de voto con un sólido 31 por ciento.
Por su parte, la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) se posiciona como segunda fuerza con un preocupante 19 por ciento, superando por cuatro puntos al Partido Socialdemócrata (SPD).
Un nuevo ciclo político en medio de una profunda incertidumbre
El anuncio de Steinmeier marca el inicio de un proceso electoral histórico que definirá el rumbo político del país.
En cumplimiento del artículo 39 de la Ley Fundamental, las elecciones deben celebrarse dentro de los próximos 60 días, un tiempo que será decisivo para los partidos en pugna.
El futuro político de Alemania pende de un hilo, con el país dividido entre el avance de la ultraderecha, la reorganización de los partidos tradicionales y la incertidumbre económica que complica aún más el escenario.
¿Y qué de la otra izquierda Alemana?
Este diario ha querido colocar en perspectiva La Alianza Sahra Wagenknecht-Por la Razón y la Justicia (BSW) que, ha emergido como una fuerza política significativa en Alemania, especialmente en el este del país.
En las recientes elecciones regionales, la BSW obtuvo más del 10% de los votos en los estados de Sajonia, Turingia y Brandeburgo, consolidándose como una opción relevante en estas regiones.
Este éxito ha llevado a que la BSW se convierta en un actor clave en la formación de gobiernos regionales. En Turingia y Sajonia, la BSW posee la capacidad de influir en la configuración de las coaliciones de gobierno, lo que resalta su creciente importancia en el panorama político alemán.
A nivel nacional, la BSW ha logrado captar la atención de la izquierda internacional debido a su combinación de perspectivas económicas de izquierda con posiciones conservadoras en temas como la inmigración.
Este enfoque ha generado debates sobre su impacto en la política alemana y su capacidad para atraer a votantes de diversos espectros ideológicos.
Asi, la Alianza de Sahra Wagenknecht ha logrado consolidarse como una fuerza política emergente en Alemania, con una influencia creciente en las regiones orientales y un impacto notable en el debate político nacional.