El congreso enfrenta su pasado bajo estrictas medidas de seguridad
El Congreso de Estados Unidos, epicentro de la democracia global, se prepara este lunes para certificar oficialmente la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales, en un contexto cargado de simbolismo y tensiones.
El acto de certificación estará liderado por Kamala Harris, quien, en un giro irónico, anunciará simultáneamente la victoria de su oponente político y su propia derrota como candidata demócrata.
Harris confirmará los 312 votos electorales obtenidos por Trump y proclamará a J.D. Vance como el próximo vicepresidente de Estados Unidos.
Cuatro años después del asalto al Capitolio
Cuatro años después del asalto al Capitolio, la certificación como presidente de Donald Trump en el lugar trae el recuerdo de aquel día que sigue ardiendo como una herida abierta en la historia del país.
Por primera vez, este proceso rutinario ha sido clasificado como un Evento Especial de Seguridad Nacional, elevando la vigilancia a niveles inéditos.
El Servicio Secreto, junto al Departamento de Seguridad Nacional, ha implementado medidas extremas para evitar cualquier repetición de los eventos del 6 de enero de 2021.
Se recuerda que los acontecimientos de aquel día dejaron un saldo de cuatro muertos, más de 140 policías heridos y una mancha indeleble en la historia democrática estadounidense.
Trump avanza entre triunfos políticos y nubes judiciales persistentes
La certificación de Trump llega en un momento de contrastes. Mientras celebra su regreso a la Casa Blanca, su historial judicial continúa siendo un terreno minado.
Este martes, el presidente electo enfrentará una audiencia clave relacionada con el caso de presunto soborno a Stormy Daniels, lo que podría empañar aún más su controvertido mandato.
En el ámbito político, Trump ha cosechado victorias significativas, como el respaldo a la reelección de Mike Johnson como presidente de la Cámara de Representantes.
Sin embargo, su camino hacia la investidura el próximo 20 de enero no está exento de críticas, incluso dentro de su propio partido.
La recta final
Con esta certificación, el país entra en la recta final hacia la investidura presidencial, prevista para el 20 de enero.
Trump regresa con su particular estilo, en un clima político polarizado y bajo el peso de su controvertido legado.
Mientras tanto, Washington se blinda, decidido a evitar cualquier sombra de insurrección en el corazón de su democracia.