Millones de trabajadores enfrentan desigualdad en un mundo en desaceleración
El panorama laboral global está en un punto crítico, según un informe revelador de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) publicado este jueves 16. La economía mundial muestra una preocupante desaceleración, erosionando la estabilidad de los mercados laborales y obstaculizando su recuperación completa.
El informe, titulado “Perspectivas Sociales y del Empleo en el Mundo: Tendencias 2025”, que nrecoge la agencia IPS, destaca que aunque el empleo mundial se mantuvo estable el año pasado, este crecimiento fue impulsado principalmente por el aumento de la población activa. Esto dejó la tasa de desempleo en un aparente 5 %, pero enmascara problemáticas profundas, como el desempleo juvenil, que alcanzó un alarmante 12,6 %.
El trabajo informal y la pobreza laboral han regresado a los niveles previos a la pandemia, afectando especialmente a los países de bajos ingresos. Estas naciones enfrentan grandes obstáculos para crear empleos decentes, agravados por tensiones geopolíticas, costos derivados del cambio climático y problemas de deuda sin resolver.
La brecha laboral: un desafío persistente que afecta a millones
El déficit mundial de empleo alcanzó los 402 millones en 2024, incluyendo 186 millones de desempleados y otros 137 millones de trabajadores desanimados que han abandonado la búsqueda activa de empleo.
Además, 79 millones de personas, aunque dispuestas a trabajar, enfrentan barreras como responsabilidades familiares que les impiden incorporarse al mercado laboral.
La desigualdad de género sigue siendo un factor clave en este contexto. Las tasas de participación laboral femenina permanecen significativamente más bajas que las masculinas, limitando el avance en los niveles de vida globales.
En América Latina y el Caribe, por ejemplo, la tasa de participación femenina se situó en 51,2 % en 2024, frente al 74,6 % de los hombres. Además, los empleos ocupados por mujeres suelen ser informales y mal remunerados.
Por otro lado, el fenómeno de los "NiNis" —jóvenes que ni estudian, ni trabajan, ni reciben capacitación— sigue en aumento. En los países de bajos ingresos, las tasas de "NiNis" masculinos han crecido 4 puntos porcentuales por encima del promedio histórico, alcanzando a 15,8 millones de jóvenes en 2024. Esta situación los deja expuestos a retos económicos y sociales de gran envergadura.
Oportunidades verdes y digitales: una luz en medio del caos
A pesar del sombrío panorama, el informe de la OIT también identifica áreas de crecimiento potencial. Los empleos en energías renovables alcanzaron los 16,2 millones en 2024, impulsados por inversiones en energía solar e hidrógeno.
No obstante, esos empleos están desigualmente distribuidos, con casi la mitad concentrados en Asia oriental.
Las tecnologías digitales también ofrecen oportunidades significativas para la creación de empleo. Sin embargo, muchos países carecen de infraestructura y competencias necesarias para aprovechar completamente estos avances.
La falta de acceso equitativo a estas tecnologías amplía la brecha entre las economías avanzadas y los países en desarrollo.
El llamado urgente de la OIT: invertir en el futuro del empleo
Gilbert Houngbo, director general de la OIT, subrayó durante la presentación del informe que “el trabajo decente y el empleo productivo son esenciales para alcanzar la justicia social”. La organización insta a los países a tomar medidas concretas para revertir esta crisis laboral global.
Las recomendaciones incluyen aumentar la productividad mediante la inversión en educación, formación e infraestructura, así como ampliar la protección social para reducir la desigualdad. Además, destaca la importancia de utilizar eficazmente los fondos privados, como las remesas y los fondos de la diáspora, para fomentar el desarrollo local en los países de bajos ingresos.
Con la economía mundial tambaleándose, la acción inmediata es vital para garantizar que los mercados laborales no solo se recuperen, sino que también se conviertan en motores de inclusión y sostenibilidad a nivel global.