Tres rehenes israelíes liberados a cambio de 90 palestinos durante alto el fuego en Gaza.
Madrid, 19 de enero (EUROPA PRESS) – En un paso significativo hacia la desescalada del conflicto en Gaza, el Ejército de Israel ha confirmado la liberación de tres rehenes israelíes a cambio de 90 prisioneros palestinos. Esta operación forma parte de un acuerdo más amplio de intercambio de cautivos, el cual comenzará a llevarse a cabo de manera gradual durante las próximas seis semanas, según informaron fuentes militares. La liberación de las tres mujeres, secuestradas por el movimiento islamista Hamás, marca un hito en la aplicación de un alto el fuego iniciado esta mañana en la región.
A las 15:00 horas (hora local), las autoridades israelíes confirmaron la liberación de Romi Gonen (24 años), Emily Damari (28 años) y Doron Steinbrecher (31 años). Estas tres personas, que habían sido retenidas por las milicias de Gaza desde hace semanas, fueron entregadas a la Cruz Roja Internacional, que, a su vez, las trasladó hacia las fuerzas militares y los servicios de inteligencia de Israel, conocidos como Shin Bet, en la Franja de Gaza.
Un proceso de intercambio gradual
Este canje, que representa el primer paso en un acuerdo más extenso, incluye la liberación de un total de 33 rehenes israelíes y más de 1.900 prisioneros palestinos, un intercambio que se desarrollará de forma progresiva a lo largo de seis semanas. La noticia de la liberación fue recibida con gran emoción por las familias de las víctimas, quienes, desde temprano en la mañana, habían recibido la noticia de que sus seres queridos serían liberados en el marco del alto el fuego.
- Minutos antes de la liberación, el Ejército israelí solicitó a las madres de las tres rehenes que se dirigieran a una base militar cercana a la frontera de Gaza. Desde allí, las mujeres pudieron acompañar a sus hijas tras su salida del hospital Sheba de Tel Aviv, donde habían sido atendidas por cuestiones de salud luego de su liberación.
Reacciones internacionales al alto el fuego y la liberación
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su satisfacción por el inicio de la liberación de los rehenes y la implementación del alto el fuego en Gaza. “Doy la bienvenida al inicio de la aplicación del alto el fuego y a la liberación de rehenes en Gaza”, señaló Guterres en un mensaje publicado en su cuenta de la red social X (anteriormente conocida como Twitter). Además, destacó que la comunidad internacional está dispuesta a aumentar los esfuerzos de ayuda humanitaria para asistir a los palestinos que siguen sufriendo las consecuencias del conflicto.
Guterres subrayó la importancia de que el alto el fuego permita “eliminar los importantes obstáculos de seguridad y políticos para la entrega de la ayuda” y agregó que se garantizará un flujo continuo de asistencia a las personas que más lo necesitan, especialmente en las zonas más afectadas por los combates.
Un acuerdo complejo y de alto riesgo
Este intercambio de prisioneros se enmarca dentro de un contexto de creciente tensión en Gaza, donde las negociaciones entre Israel y Hamás han sido siempre complejas y difíciles de lograr. El acuerdo de alto el fuego, que es vigilado por la ONU y otras organizaciones internacionales, ha generado expectativas tanto en Israel como en Palestina, pues se espera que sea un primer paso hacia una posible solución más duradera al conflicto.
Si bien la liberación de los rehenes y la tregua temporal ofrecen un respiro, la situación sigue siendo volátil, con numerosos desafíos en cuanto a la implementación completa del alto el fuego y la posible reanudación de los enfrentamientos. La comunidad internacional, encabezada por la ONU, seguirá de cerca los desarrollos y buscará apoyar el proceso para asegurar que el acuerdo sea respetado por ambas partes.
Los próximos pasos y la esperanza de una paz duradera
A pesar de que el intercambio de rehenes ha sido recibido como un avance positivo, los expertos advierten que el proceso de paz en Gaza aún está lejos de ser alcanzado. Las conversaciones continúan siendo tensas, y tanto Israel como Hamás se enfrentan a presiones internas y externas que complican cualquier intento de acuerdo a largo plazo. Sin embargo, el inicio de este intercambio de prisioneros brinda una luz de esperanza para aquellos que anhelan la paz en la región.
El tiempo dirá si este alto el fuego puede ser el primer paso hacia una resolución más amplia y duradera, pero por ahora, las familias de las víctimas celebran la liberación de sus seres queridos como un signo de que, incluso en los momentos más oscuros, la diplomacia y la humanidad pueden prevalecer.
En las próximas semanas, la comunidad internacional seguirá vigilante mientras se lleva a cabo el intercambio, esperando que este acuerdo sirva como un precedente para futuras negociaciones de paz en la región.
