Herramienta optimiza evacuaciones y mejora respuesta en emergencias y desastres
La capital dominicana se posiciona como pionera en la gestión de emergencias gracias a un proyecto revolucionario liderado por UNAPEC y la Universidad Politécnica de Valencia (UPV). Esta iniciativa combina la inteligencia artificial y datos en tiempo real para diseñar rutas de evacuación más seguras y eficaces, marcando un antes y un después en la planificación ante desastres.
El eje central del proyecto es un “gemelo digital” de Santo Domingo, un modelo virtual que integra información vital como patrones de tráfico, datos socioeconómicos y herramientas como Google Maps y Waze.
Esta simulación avanzada, desarrollada sobre la plataforma GAMA, permite predecir el comportamiento de la población ante emergencias.
“El objetivo es optimizar las respuestas no solo ante fenómenos naturales, sino también en crisis sociales y de seguridad pública”, explicó el Dr. Fernando Manzano, investigador principal del proyecto.
Una colaboración internacional con impacto local e internacional
El proyecto, respaldado por el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT), es un esfuerzo conjunto entre expertos dominicanos y españoles.
Además de académicos como el Dr. José Conejero y el Dr. Pedro Solares, participan estudiantes e investigadores de UNAPEC, quienes desarrollan soluciones adaptables a otras ciudades y países.
El Dr. Alvin Rodríguez, director de Investigación en UNAPEC, destacó: “Esta tecnología no solo beneficia a Santo Domingo, sino que también podría posicionarse como un modelo replicable a nivel global.”
Santo Domingo, referente en resiliencia y planificación de emergencias
Con esta herramienta, las autoridades podrán simular escenarios de evacuación en tiempo real, reduciendo riesgos y maximizando la seguridad ciudadana.
Este proyecto refuerza la confianza de la población en las medidas preventivas y destaca a Santo Domingo como un centro de innovación y resiliencia.
La capital dominicana se consolida como un líder regional en planificación ante desastres, estableciendo un precedente para el uso de la tecnología en la protección de sus ciudadanos y sentando las bases para un futuro más seguro y sostenible.