Mientras amenaza deportar por protestas propalestinas en universidades; restringe financiación en escuelas
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado una nueva orden ejecutiva con la que busca intensificar su política migratoria y disciplinar a los campus universitarios. La medida contempla la deportación inmediata de estudiantes extranjeros que participen en protestas propalestinas y la cancelación de los visados de aquellos que sean considerados "simpatizantes de Hamás".
"Todos los extranjeros residentes que se unieron a las protestas yihadistas deben saber que en 2025 los encontraremos y los deportaremos", enfatizó Trump en un comunicado emitido por la Casa Blanca.
La declaración marca un giro radical en su estrategia migratoria y refleja su intención de reformar el sistema educativo para erradicar lo que califica como "adoctrinamiento radical" en las universidades.
Trump promete frenar el radicalismo en campus universitarios de ee. uu.
La orden también contempla la cancelación "rápida" de los visados de todos aquellos estudiantes que sean identificados como simpatizantes del grupo islamista Hamás, argumentando que los campus universitarios están "infestados de radicalismo como nunca antes".
La iniciativa de Trump no es nueva. Durante su primer mandato, en diciembre de 2019, aprobó una orden similar con el objetivo de combatir lo que describió como "acoso antisemita" en las universidades.
En esta ocasión, refuerza su postura con medidas adicionales que buscan erradicar cualquier tipo de manifestación que interprete como discriminación antisemita o apoyo a organizaciones extremistas.
La medida instruye a varias agencias gubernamentales a presentar informes en un plazo de 60 días, detallando las acciones que se pueden tomar contra universidades que, según Trump, no protegen a los estudiantes judíos y permiten actividades que él califica como "peligrosas".
Recorte de fondos a escuelas que fomenten "ideología radical" y adoctrinamiento
En paralelo a las medidas en los campus universitarios, Trump también ha firmado una orden ejecutiva para restringir la financiación de escuelas que promuevan lo que llama "adoctrinamiento radical".
Entre las temáticas que considera problemáticas están la teoría crítica de la raza, la "ideología de género radical" y la "equidad discriminatoria".
"Mi Administración garantizará que ninguna escuela que reciba fondos federales promueva doctrinas que atenten contra los valores fundamentales del país", aseguró el exmandatario.
Trump también ordenó a los Departamentos de Educación, Defensa y Salud presentar una estrategia en un plazo de 90 días para erradicar el "adoctrinamiento" en el sistema educativo.
Según el decreto, estas medidas buscan proteger la autoridad de los padres en la educación de sus hijos y fomentar la "libertad educativa".
Nueva política educativa pretende reforzar alternativas para padres y estudiantes
Dentro de la misma orden, se contemplan incentivos para ampliar las opciones educativas de las familias.
Así, los Departamentos de Trabajo y Educación trabajarán en la creación de subvenciones para impulsar la libertad educativa, permitiendo que las familias tengan acceso a diversas alternativas, incluidas escuelas privadas, religiosas, charter y públicas.
En un gesto político significativo, Trump ha extendido estas medidas a las familias de las Fuerzas Armadas, solicitando que el Departamento de Defensa desarrolle mecanismos para que los militares puedan destinar fondos educativos a la escuela de su elección.
De igual forma, se han incluido disposiciones específicas para las escuelas bajo la Oficina de Educación Indígena.
Estas medidas reflejan un endurecimiento drástico en la política educativa y migratoria de Trump, alineándose con su discurso de mano dura contra el radicalismo y su crítica a la administración de Joe Biden.