Intervención marca posible disolución de la agencia de ayuda internacional
El Departamento de Estado de Estados Unidos, liderado por el secretario Marco Rubio, ha asumido el control de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID), confirmó este lunes desde El Salvador.
Esta decisión representa un paso más hacia la posible disolución de la agencia, alineada con la política exterior del gobierno de Donald Trump, quien ha criticado duramente su funcionamiento, destaca Europa Press.
Rubio justifica intervención y critica gestión de la USAID
Rubio afirmó que la USAID debe alinearse con los intereses nacionales y la política exterior de Estados Unidos, algo que, según él, la agencia "se niega" a hacer.
Calificó a la USAID como una entidad "completamente indolente" y anunció que su gestión ha sido delegada a un funcionario cercano a su equipo.
Sin embargo, reconoció que algunos programas de la agencia son "buenos" y deben continuar, aunque otros están bajo revisión.
Cierre de sede y enfrentamiento con agencia de Elon Musk
Este lunes, la sede de la USAID en Washington permaneció cerrada, en un contexto de tensiones con la Agencia de Eficiencia Pública (DOGE), dirigida por el magnate Elon Musk, aliado de Trump.
Miles de empleados de la USAID recibieron instrucciones de no acudir a sus puestos de trabajo, y sus cuentas de correo oficiales fueron bloqueadas.
Además, se reportó que personal de DOGE accedió a documentación clasificada de la USAID, lo que generó críticas por parte de la congresista Alexandria Ocasio-Cortez, quien denunció una "grave amenaza para la seguridad nacional".
Futuro incierto para la ayuda humanitaria estadounidense.
La USAID, creada en 1961 por el presidente John F. Kennedy, ha sido un pilar de la ayuda humanitaria internacional, destinando miles de millones de dólares a combatir la pobreza, enfermedades, hambrunas y desastres naturales.
También ha promovido la democracia y el desarrollo a través de apoyo a ONG y medios independientes.
Sin embargo, su futuro es incierto tras la intervención del Departamento de Estado y las críticas de Trump, quien la calificó como dirigida por "una panda de lunáticos radicales".
Mientras las investigaciones y tensiones continúan, la comunidad internacional observa con preocupación el posible desmantelamiento de una agencia clave en la promoción del desarrollo global.