Estudio revela cómo el uso digital afecta el desarrollo infantil
Un estudio reciente, en el que han colaborado investigadores de diversas universidades, ha confirmado que el uso de dispositivos digitales en niños puede potenciar ciertas habilidades cognitivas, como la colaboración y la empatía. Sin embargo, también advierte sobre los riesgos asociados a un uso excesivo, como la reducción de la atención y el deterioro de las habilidades sociales.
El equipo de investigación analizó a fondo los efectos del uso de dispositivos digitales en el desarrollo cerebral, las funciones cognitivas y el comportamiento de los niños, recoged Europa Press.
Los resultados muestran que el impacto no es uniforme, ya que factores como la edad, el género y el nivel socioeconómico influyen en cómo la tecnología afecta a cada niño.
Por ejemplo, mientras algunas herramientas digitales pueden mejorar el rendimiento académico y las funciones ejecutivas, su uso desmedido puede generar distracciones y reducir la capacidad de concentración.
Efectos negativos: atención, sueño y comportamiento
Entre los principales riesgos identificados se encuentran la disminución de la atención sostenida, alteraciones en los patrones de sueño y, en casos extremos, la aparición de comportamientos disruptivos.
Además, aunque los dispositivos pueden fomentar la colaboración y la empatía, también pueden provocar aislamiento social y dificultades en las interacciones cara a cara.
Un uso excesivo también puede obstaculizar el desarrollo de habilidades como el lenguaje y la resolución de problemas.
Recomendaciones para un uso saludable de la tecnología
Los investigadores han destacado la importancia del contenido digital y la mediación parental para maximizar los beneficios y minimizar los riesgos. Recomiendan que los padres supervisen el uso de dispositivos y promuevan interacciones digitales de calidad.
Además, subrayan la necesidad de establecer límites claros y fomentar un uso controlado e intencionado de la tecnología, lo que puede potenciar la creatividad y otras habilidades cognitivas específicas.
En sus conclusiones, los expertos han enfatizado que, aunque los dispositivos digitales ofrecen oportunidades valiosas para el desarrollo infantil, su uso debe ser regulado cuidadosamente para evitar efectos adversos.
Asimismo, han señalado la necesidad de realizar más investigaciones para comprender los impactos a largo plazo y desarrollar directrices que promuevan una integración saludable de la tecnología en la vida de los niños.
En este estudio participó Ismael Martínez Guardado, del Grupo de Investigación del Laboratorio de Fisiología del Esfuerzo de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), junto a investigadores de la Universidad Europea, la Universidad de Nebrija, la UNIE y la Universidad de la Costa (CUC) de Colombia.