Alianzas estratégicas y transporte de carga amplían su red internacional
Bajo un cielo caribeño que cada vez recibe más alas, la República Dominicana consolida su posición como epicentro de la aviación regional. Con nuevas rutas, operadores aéreos innovadores y una visión estratégica, el país avanza hacia un futuro donde la conectividad internacional y el dinamismo económico van de la mano.
Nuevos actores, nuevas oportunidades
En su tercera sesión ordinaria del año, la Junta de Aviación Civil (JAC), liderada por Héctor Porcella, dio luz verde a proyectos que transformarán el mapa aéreo dominicano. Uno de ellos es SETRAD, Servicios de Transporte Aéreo Dominicano, que operará vuelos chárter desde el Aeropuerto La Isabela y despachará desde Punta Cana. Con aeronaves de hasta nueve pasajeros, la compañía planea despegar en marzo de 2025, ofreciendo flexibilidad para viajes nacionales e internacionales.
Pero el cielo dominicano no solo se pinta con aviones pequeños. SkyHigh Aviation Services Dominicana, dirigida por Cesarina Virginia Beauchamps, recibió un permiso especial para conectar Santo Domingo con Guyana mediante 80 vuelos exclusivos entre marzo y septiembre de 2025. Esta ruta, sin competencia directa, se convierte en un puente estratégico hacia Sudamérica, reforzando lazos comerciales y turísticos.
Carga y pasajeros: un equilibrio con visión de futuro
SkyHigh no se limita a pasajeros. Con una audaz propuesta de 427 vuelos internacionales, la empresa combinará transporte de carga y viajeros en rutas clave como Miami, Holguín y Santiago de Cuba. Este modelo híbrido responde a la creciente demanda logística en el Caribe, donde la República Dominicana emerge como centro distribuidor.
A este escenario se suma JetBlue Airways, que programará 1,220 vuelos regulares durante la temporada invernal de 2025. Desde finales de enero hasta marzo, la aerolínea reforzará su presencia en el país, beneficiando tanto a turistas como a viajeros frecuentes.
Un hub que trasciende el turismo
Más que un destino de sol y playa, el país se reinventa como un nodo multimodal. «Estas autorizaciones reflejan nuestro compromiso con la innovación y el desarrollo económico», destacó Porcella. La apuesta por el transporte de carga —un sector en auge— amplía las oportunidades para exportadores locales y atrae inversiones en logística.
Los aeropuertos La Isabela y Punta Cana, junto al de Las Américas, se perfilan como ejes de esta transformación. Según analistas, el impacto económico incluirá creación de empleos, mayor competitividad en sectores como agroexportación y fortalecimiento de la red de negocios regionales.
Hacia 2025: un horizonte de conexiones
Con miras al próximo año, la República Dominicana no solo expande su oferta aérea, sino que sienta las bases para un crecimiento sostenido. La diversificación de rutas, la incorporación de tecnologías y las alianzas público-privadas marcan un camino claro: convertir el país en el hub del Caribe, donde cada despegue es un paso hacia el desarrollo.
En un mundo donde la conectividad define el progreso, la isla caribeña demuestra que, cuando se trata de volar alto, no hay límites.