Informe alerta sobre riesgo de financiar grupos terroristas por recortes
El inspector general de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Paul K. Martin, fue cesado este martes tras publicar un informe que advierte sobre el riesgo de que la agencia esté "financiando inadvertidamente a organizaciones terroristas" debido a los recortes de personal y fondos implementados por la Administración Trump.
Martin, quien asumió el cargo en diciembre de 2023, recibió un correo electrónico notificándole su despido "con efecto inmediato", despliega Europa Press.
El informe, publicado el lunes, destaca que la reducción de personal en la USAID está limitando la capacidad de investigar a los socios locales en programas de ayuda humanitaria en países como Afganistán, Irak, Siria y Yemen.
Esta falta de supervisión aumenta el riesgo de que los fondos estadounidenses terminen en manos de grupos como Hamás, Hezbolá, Estado Islámico o los hutíes yemeníes.
Recortes de personal debilitan supervisión de fondos humanitarios
El documento revela que diez miembros de la unidad de investigación de antecedentes antiterroristas fueron suspendidos recientemente, lo que ha paralizado las investigaciones clave.
"Esta brecha deja a la USAID susceptible de financiar inadvertidamente a entidades o individuos asociados con organizaciones terroristas", señala el informe.
Además, la semana pasada, el Gobierno estadounidense colocó en "licencia administrativa" a gran parte del personal contratado directamente por la USAID a nivel mundial, excepto a aquellos en puestos críticos.
Según el secretario del Departamento de Estado, Marco Rubio, menos de 300 empleados de un total de mil permanecen activos.
La USAID, creada en 1961 por el presidente John F. Kennedy, tiene un presupuesto de miles de millones de dólares destinados a combatir la pobreza, enfermedades, hambrunas y desastres naturales en todo el mundo.
Sin embargo, la agencia ha sido criticada por la Administración Trump, que la considera un ejemplo de derroche y desviación fraudulenta de fondos.
Este despido y las medidas de recorte han generado preocupación sobre la capacidad de la USAID para cumplir su misión humanitaria y garantizar que los fondos no sean desviados hacia actividades terroristas.