El universo desafía su equilibrio: indicios de anisotropía en el cosmos
Durante décadas, el Principio Cosmológico ha sido la piedra angular de la astronomía moderna, sosteniendo que a gran escala el universo es isótropo y homogéneo. Sin embargo, un reciente estudio publicado en el Journal of Cosmology and Astroparticle Physics (JCAP) desafía esta suposición mediante el análisis de lentes gravitacionales débiles.
"El principio cosmológico es una declaración de humildad", explica James Adam, astrofísico de la Universidad de Western Cape, quien lidera la investigación.
Según este concepto, no solo la Tierra no ocupa una posición privilegiada en el cosmos, sino que ningún punto del universo tiene preeminencia sobre otro.
Esta idea respalda el Modelo Estándar de Cosmología, la teoría dominante sobre la evolución y estructura del universo.
Sin embargo, diversas observaciones recientes desafían la hipótesis de la isotropía. Mediciones contradictorias sobre la tasa de expansión del universo, estudios sobre la radiación de fondo de microondas y ciertas inconsistencias en los datos astronómicos han revelado posibles anisotropías.
Estas irregularidades, aunque aún no son concluyentes, podrían indicar que el universo posee direcciones preferentes en su estructura a gran escala.
La lente gravitacional débil para medir la anisotropía del espacio
Para abordar esta incertidumbre, el equipo de Adam desarrolló un novedoso método basado en el fenómeno de lente gravitacional débil.
Este efecto ocurre cuando la materia intermedia distorsiona la luz de galaxias distantes, alterando su forma aparente.
A partir de esta técnica, los científicos buscan identificar indicios de anisotropía en el universo.
La metodología aplicada se basa en analizar dos componentes de la señal de cizallamiento: modo E y modo B.
En un universo completamente isótropo, el modo B debería ser insignificante. No obstante, la detección de correlaciones entre ambos modos podría evidenciar una expansión anisotrópica del cosmos.
Para poner a prueba esta hipótesis, los investigadores utilizarán datos obtenidos por Euclid, un telescopio espacial lanzado en 2023 por la Agencia Espacial Europea.
Este observatorio, con su capacidad sin precedentes, podría ofrecer respuestas definitivas sobre la estructura del universo.
"Una vez que revisemos los datos de Euclid y confirmemos nuestras simulaciones, podríamos enfrentar una revisión fundamental de la cosmología", advierte Adam.
Si los patrones de anisotropía se corroboran, sería necesario reconsiderar el Modelo Estándar, abriendo la puerta a nuevas teorías sobre la evolución del cosmos.