Envejecimiento acelerado y caída en la tasa de natalidad agravan el panorama
Cuba ha visto disminuir su población a 9,7 millones de habitantes en 2024, una reducción de 300.000 personas respecto al año anterior que había registrado 10,05 millones del 2023.
Esta tendencia demográfica decreciente responde a una combinación de baja natalidad, aumento de la mortalidad y migración sostenida, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) que recoge la agencia Xinhua.
El vicejefe de la ONEI, Juan Carlos Alfonso Fraga, destacó que en 2024 solo hubo 71.000 nacimientos, una cifra alarmantemente baja. Además, más del 25 % de la población tiene 60 años o más, un fenómeno que estaba proyectado para 2030 pero que ya es una realidad.
El experto advirtió que el país seguirá enfrentando una disminución en la población infantil, adolescente y en edad reproductiva, mientras que el segmento de adultos mayores continuará en ascenso.
Estrategias económicas deben adaptarse a un país con menos jóvenes y más ancianos
El director del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana, Antonio Aja, enfatizó que esta transformación demográfica no debe verse como un problema a enfrentar, sino como una realidad a atender.
Aja subrayó que la planificación económica debe priorizar las necesidades de una sociedad envejecida, en lugar de diseñar estrategias y luego considerar a la población.
Por su parte, la viceministra primera de Economía y Planificación, Mildrey Granadillo, anunció una asignación de 2.456 millones de pesos (aproximadamente 20 millones de dólares) para atender la dinámica demográfica.
Indicó que este presupuesto, superior al del año pasado en 1.071 millones de pesos, se destinará principalmente a mejorar los servicios de cuidado para niños menores de seis años y adultos mayores en situación de discapacidad.
Entre las medidas adoptadas, se priorizará la producción de ayudas técnicas como bastones, muletas, andadores y sillas de ruedas, en un intento por responder al creciente envejecimiento poblacional.
Actualmente, se estima que más de 3 millones de cubanos residen en el exterior, de los cuales 2 millones nacieron en Cuba, el resto son descendientes de los migrantes. Esta migración constante agrava aún más el desequilibrio poblacional y plantea desafíos urgentes para el futuro del país.