El país dice reivindicar su soberanía absoluta y excusa a las organizaciones de parcialidad internacional
El gobierno de Nicaragua ha tomado una decisión soberana e irrevocable al retirarse de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), exigiendo además el cierre inmediato de sus oficinas en el país.
Esta determinación, anunciada por el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex), responde a lo que consideran una interferencia injustificada y politizada por parte de ambos organismos.
En una comunicación oficial dirigida a Gilbert F. Houngbo, director general de la OIT, la cancillería nicaragüense denuncó que las resoluciones emitidas por el Consejo de Administración de la OIT están basadas en información sesgada y manipulada, promovida por grupos que buscan desestabilizar el país.
Además, señalaron que estos organismos han respaldado actores responsables de violencia y caos, ocasionando daños incalculables a la economía y a la paz social en Nicaragua.
Acusaciones de parcialidad y violación de la autodeterminación nacional
El Minrex acusó a la OIT de actuar con un claro doble rasero, instrumentalizando las quejas internacionales en su contra con un enfoque politizado y parcializado.
Según el gobierno nicaragüense, la organización ha desnaturalizado su rol al intervenir en asuntos que pertenecen exclusivamente a la jurisdicción interna de los Estados, lo que representa una violación a la soberanía nacional.
En cuanto a la OIM, la cancillería rechazó su informe sobre las migraciones en el mundo del 2024, calificándolo de tendencioso y carente de rigor.
Sostienen que la OIM ha fallado en abordar las causas estructurales de la migración y ha mantenido un trato desigual y discriminatorio entre los países, lo que contradice el principio de igualdad soberana de las naciones.
Afirmación de un modelo soberano y revolucionario
Nicaragua reafirmó su compromiso con un modelo revolucionario y autónomo, respaldado por las reformas constitucionales vigentes desde el 18 de febrero de 2025.
En ese contexto, el gobierno declaró que la nación se constituye como un Estado libre e independiente, donde la persona, la familia y la comunidad son el eje central de su política.
Finalmente, la administración nicaragüense enfatizó que continuará su lucha por la justicia y el desarrollo humano, garantizando la seguridad y estabilidad del pueblo.
En ese marco, su desvinculación de la OIT y la OIM representa, según el gobierno, un paso firme hacia la defensa de la autodeterminación y el rechazo a toda injerencia externa. con Datos de Prensa Latina.