La Comisión Ambiental alerta sobre intoxicaciones masivas y pide regulaciones urgentes.
Santo Domingo.- La Comisión Ambiental de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) ha alzado su voz ante la creciente crisis de intoxicaciones masivas en San Francisco de Macorís, atribuidas a fumigaciones irresponsables cerca de escuelas y comunidades residenciales. La entidad académica exige una respuesta inmediata de las autoridades para prevenir más afectaciones a la salud pública y el ecosistema.
Un problema de salud pública desatendido
Diversos reportes han documentado repetidos casos de intoxicación, afectando especialmente a estudiantes y docentes. Según la UASD, la falta de regulaciones efectivas y la ausencia de acciones concretas por parte de las autoridades han permitido la continuidad de esta peligrosa práctica.
La legislación vigente en República Dominicana, como la Ley General de Medio Ambiente y Recursos Naturales (64-00) y la Ley General de Salud (42-01), prohíbe el uso incontrolado de plaguicidas en áreas sensibles. Sin embargo, la falta de aplicación estricta de estas normativas ha generado un escenario de riesgo constante para la población.
Impacto en la salud y el medio ambiente
Los efectos de la exposición a plaguicidas no se limitan a intoxicaciones inmediatas. Estudios científicos han relacionado estas sustancias con problemas neurológicos, alteraciones endocrinas, infertilidad e incluso ciertos tipos de cáncer. Además, su uso indiscriminado daña el ecosistema, afectando organismos esenciales como abejas, aves y anfibios, lo que a largo plazo perjudica el equilibrio natural y la producción agrícola.
Medidas urgentes propuestas por la UASD
Ante la gravedad del problema, la Comisión Ambiental de la UASD insta a la implementación de acciones concretas:
- Sanciones ejemplares: Aplicación rigurosa de las leyes ambientales y de salud, imponiendo multas y clausuras a quienes realicen fumigaciones irresponsables.
- Monitoreo y control: Creación de un comité interinstitucional para inspeccionar periódicamente a las empresas fumigadoras y garantizar el cumplimiento de normativas.
- Uso regulado de plaguicidas: Lista oficial de productos permitidos, priorizando aquellos de menor toxicidad y restringiendo el uso de sustancias peligrosas.
- Capacitación especializada: Certificación obligatoria para aplicadores de plaguicidas, con formación en buenas prácticas agrícolas y protección ambiental.
- Adopción de estándares internacionales: Implementación de directrices de la OMS, FAO y OPS para minimizar el impacto de los agroquímicos en la salud y el medio ambiente.
Llamado a la acción
La UASD hace un llamado a las autoridades, comunidad educativa y sociedad civil a denunciar cualquier violación a las normas ambientales y exigir soluciones inmediatas. Asimismo, reafirma su compromiso de colaborar con la investigación y el desarrollo de prácticas seguras en el manejo de plaguicidas.
La universidad enfatiza que la protección de la salud pública y el equilibrio ecológico no pueden esperar más. Es hora de actuar para garantizar un futuro más seguro y sostenible para todos.