Es recurrente que aviones de combate intercepten aeronaves en espacio aéreo restringido desde que Trump asumió la presidencia
El Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (NORAD) informó que este domingo se registró un nuevo incidente en el que una aeronave civil ingresó al espacio aéreo restringido cerca de la residencia del presidente Donald Trump en Mar-a-Lago, Florida.
Aviones de combate F-16 interceptaron la nave y lanzaron bengalas para alertar al piloto, en un procedimiento que se ha vuelto rutinario desde que Trump asumió la presidencia en enero. Este evento se suma a más de 20 intercepciones similares desde entonces, indicó, NORAD.
Aunque estas incursiones no han afectado la seguridad del presidente ni alterado su agenda, han generado preocupación debido a la frecuencia con la que ocurren en una de las zonas aéreas más congestionadas del sur de Florida,
Restricciones aéreas y protocolos de seguridad en Mar-a-Lago
Cuando el presidente se encuentra en su residencia de Mar-a-Lago, se establece una zona de restricción aérea permanente que abarca un radio de 30 millas náuticas.
Esta medida busca garantizar la seguridad del mandatario y su entorno, pero no ha impedido que aviones civiles violen el espacio aéreo en varias ocasiones.
En 2017, durante el primer mandato de Trump, un incidente similar ocurrió cuando dos aviones F-15 interceptaron una aeronave no identificada cerca de Mar-a-Lago. El operativo generó un estruendo sónico que alarmó a los residentes de la zona.
Aunque estos eventos no han tenido consecuencias graves, las autoridades han reiterado la importancia de respetar las restricciones aéreas para evitar riesgos innecesarios.
NORAD ha enfatizado la necesidad de concienciar a los pilotos civiles sobre estas normas, especialmente en áreas cercanas a instalaciones presidenciales.
Mientras tanto, los protocolos de intercepción y seguridad continúan activos para garantizar la protección del presidente y su entorno durante sus estancias en Florida.