El presidente resalta crecimiento económico, inversión récord y avances sociales.
Santo Domingo. — La República Dominicana vive uno de sus momentos de mayor fortaleza, prosperidad y preparación para el futuro, aseguró el presidente Luis Abinader al participar como orador invitado y huésped de honor en el tradicional almuerzo de la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AMCHAMDR).
Durante su discurso, titulado “La República Dominicana en el contexto de las nuevas tendencias del comercio mundial”, el mandatario hizo un llamado a la confianza y al optimismo nacional. “El desarrollo no llega solo; se construye. Y nosotros ya comenzamos”, expresó, destacando la resiliencia y capacidad del país para seguir avanzando pese a los desafíos globales.
Abinader resaltó que la economía dominicana creció un 5% en 2024, superando el promedio regional de 2.5%, consolidándose como una de las economías más dinámicas de América Latina. La meta del gobierno es ambiciosa: duplicar el tamaño de la economía en la próxima década y alcanzar un ingreso per cápita de US$15,000.
La inversión extranjera directa alcanzó un récord de US$4,512 millones en 2024, posicionando al país como líder en Centroamérica y el Caribe. Este impulso se ha visto reforzado por un control fiscal responsable, logrando reducir la deuda pública consolidada al 57.5% del PIB.
Además, las exportaciones alcanzaron su mejor año histórico con US$13,852 millones, proyectándose a superar los US$17,000 millones en cuatro años. También destacó el impacto positivo de las reservas de tierras raras y los altos precios del oro, lo que fortalece las finanzas públicas.
En materia de empleo, el presidente informó que en 2024 se crearon 165,000 nuevos empleos formales y la tasa de desempleo descendió a un mínimo histórico del 4.8%. La pobreza se redujo del 23% al 18.98%, sacando a más de 440,000 personas de esa condición en apenas un año.
La política de diversificación económica es otra prioridad del gobierno, enfocándose en energías renovables, economía digital, agroindustria y manufactura de alta tecnología. “Estamos trabajando para convertir a la República Dominicana en un centro estratégico de producción de semiconductores y componentes electrónicos”, indicó Abinader.
En materia social, resaltó el alcance del programa Supérate, que impacta a más de 1.5 millones de familias. Además, la tasa de homicidios bajó un 16% en 2024, colocándose entre las más bajas de Centroamérica y el Caribe.
Por su parte, Edwin De los Santos, presidente de AMCHAMDR, destacó la evolución positiva del país y celebró la eliminación de restricciones a las exportaciones de azúcar hacia Estados Unidos, calificando la medida como un triunfo para el comercio bilateral.
El presidente Abinader concluyó reafirmando su compromiso con un clima de negocios estable, transparente y confiable: “El momento de invertir y crecer en la República Dominicana es ahora”.
