Las fuertes lluvias, tormentas eléctricas e inundaciones repentinas han afectado varios estados del sur y el medio oeste
Estados Unidos vuelve a ser golpeado por una ola de tormentas devastadoras que ha cobrado la vida de al menos 16 personas, incluidos dos niños, en varios estados del sur y el medio oeste.
Las fuertes lluvias, tormentas eléctricas e inundaciones repentinas han sembrado el pánico desde el pasado miércoles, afectando con especial dureza a Tennessee, Kentucky, Misuri, Indiana y Arkansas.
En Tennessee, las autoridades confirmaron diez muertes, mientras que en Kentucky un niño de nueve años fue arrastrado por una corriente cerca de una parada de autobús, y un hombre de 74 años quedó atrapado en su vehículo durante una crecida.
Comunidades enteras bajo alerta máxima por inundaciones y clima severo
En Misuri, la tragedia se ha cobrado la vida de dos bomberos en días distintos, ambos en cumplimiento de su deber durante condiciones meteorológicas extremas. En Indiana, un joven de 27 años murió electrocutado tras el colapso de un tendido eléctrico en medio de una tormenta.
En Arkansas, un niño de cinco años perdió la vida dentro de su casa en circunstancias directamente vinculadas al mal tiempo en curso, según informó el Departamento de Seguridad Pública estatal.
El desastre climático ha dejado, además, decenas de miles de viviendas sin energía, ha ocasionado más de 6.000 vuelos retrasados y ha puesto a unos 41 millones de personas en situación de riesgo debido a tormentas severas desde el valle del río Ohio hasta el sureste de Texas, según el Centro de Predicción de Tormentas.
El nivel de alerta meteorológica alcanza su punto más crítico del año
Este sábado marcó el tercer día consecutivo con riesgo de nivel 4 —el más alto— por inundaciones repentinas, una situación rara fuera de la temporada oficial de huracanes.
Esta racha de eventos extremos llega apenas semanas después de que en marzo, condiciones similares causaran la muerte de unas 40 personas en el país.
Las autoridades continúan en máxima alerta mientras meteorólogos advierten que las tormentas podrían persistir en los próximos días, lo que pone a millones en vilo ante una temporada climática que ya supera lo esperado.