El pontífice expresó su cercanía al pueblo dominicano en carta oficial
Santo Domingo, República Dominicana — En un gesto de profundo pesar, el Papa Francisco envió un mensaje de condolencias al pueblo dominicano tras la trágica explosión ocurrida en la discoteca Jet Set durante la madrugada del martes 8 de abril, la cual ha cobrado la vida de al menos 184 personas, según el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
La misiva, dirigida a través de la Nunciatura Apostólica, fue firmada por el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado de la Santa Sede, y en ella el Sumo Pontífice expresó su “sentido pésame a los familiares de los fallecidos, junto con sus expresiones de consuelo, viva solicitud y deseos de pronto restablecimiento de los heridos”.
El Papa también manifestó su cercanía espiritual con el pueblo dominicano en este momento de luto nacional, transmitiendo su apoyo y oración por las víctimas y por quienes sufren las consecuencias de la tragedia. “Su Santidad acompaña con la oración a todos los afectados y confía en la misericordia de Dios para brindar alivio y esperanza”, se lee en el comunicado.
Asimismo, el Papa Francisco dirigió un mensaje de aliento a los rescatistas, voluntarios y autoridades que permanecen en el lugar de los hechos. Reconoció su entrega y sacrificio, animándolos a “perseverar en los esfuerzos de ayuda y acompañamiento”, al tiempo que impartió su “confortadora bendición apostólica como signo de esperanza en el Señor resucitado”.
La tragedia ha conmocionado al país, provocando una respuesta inmediata de organismos de socorro, autoridades civiles y entidades religiosas. La Iglesia Católica en la República Dominicana ha estado acompañando espiritualmente a los familiares y comunidades afectadas, ofreciendo misas y espacios de oración.
El gesto del Papa Francisco ha sido recibido con gratitud por la sociedad dominicana, en especial por las familias en duelo que encuentran consuelo en sus palabras y en la cercanía de la Iglesia. La Nunciatura ha indicado que se mantendrá en constante comunicación con las autoridades locales para continuar brindando apoyo espiritual en los días venideros.
En medio del dolor, el mensaje del pontífice representa un llamado a la unidad, la solidaridad y la esperanza. La bendición apostólica busca ser un bálsamo para una nación que aún trata de asimilar la magnitud de lo ocurrido.