La AIRD celebró operativos contra el contrabando, la evasión fiscal y la competencia desleal
La Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) advirtió que el país no podrá alcanzar su verdadero potencial competitivo mientras existan actores que operan fuera del marco legal. Por ello, la organización celebró los recientes operativos realizados para combatir el contrabando, la evasión fiscal y la competencia desleal, fenómenos que amenazan la salud pública, la economía formal y el desarrollo industrial.
Al respecto, la Dirección General de Aduanas (DGA) ha intensificado sus labores de fiscalización y control, detectando irregularidades en procesos de importación que han servido de alerta para fortalecer la lucha contra el comercio ilegal.
Para la AIRD, estas acciones representan un mensaje contundente para quien ignore la ley, de que enfrentará consecuencias por el accionar ilegal.
Así, Mario Pujols, vicepresidente ejecutivo de la AIRD, reconoció el esfuerzo de la DGA y señaló que este tipo de controles responde a una preocupación persistente del sector industrial. “En nuestros rankings trimestrales de competitividad, la competencia desleal figura entre los principales obstáculos señalados por las empresas”, sostuvo.
Lucha contra prácticas económicas ilegales y nocivas
Además de Aduanas, otros organismos han jugado un rol crucial en esta cruzada. El CECCOM, en conjunto con el MICM, DIGEMAPS, Pro Consumidor y otras entidades, ha realizado operativos preventivos a nivel nacional.
Los resultados de los operativos han sido decomisos masivos de cigarrillos de contrabando, alcohol en condición irregular y medicamentos sin registro sanitario, así como procesamientos judiciales contra una docena de responsables.
Pujols enfatizó que estos productos no solo atentan contra la industria formal, sino que también suponen un riesgo grave para la salud de los consumidores.
La evasión fiscal debilita al estado y socava la industria nacional
Para la AIRD, mantener estos operativos es imperativo. La evasión fiscal, el contrabando y el comercio informal no solo restan competitividad a las industrias que cumplen con sus deberes, sino que además erosionan los ingresos del Estado y generan un entorno económico injusto.
“El país necesita reglas claras, aplicadas con firmeza. No se puede construir desarrollo con impunidad”, concluyó Pujols.