La empresa procedería, en caso de que la justicia estadounidense obligue a Google a vender su navegador
Nueva York.–La empresa OpenAI, conocida mundialmente por su sistema ChatGPT, ha expresado su interés en adquirir Google Chrome si la justicia estadounidense obliga a su venta. Esta posibilidad se enmarca en el contexto del juicio antimonopolio que enfrenta Google, señalado por controlar el 90 % del mercado de búsquedas en línea mediante prácticas de exclusividad.
Desde septiembre de 2023, el Departamento de Justicia busca fragmentar a Google para restablecer la competencia digital. Una de las medidas planteadas incluye la venta del navegador Chrome, el más utilizado del mundo. En este escenario, OpenAI ha manifestado que ve esta oportunidad como un paso clave para revolucionar la experiencia de búsqueda con inteligencia artificial.
Nick Turley, director de producto de ChatGPT, fue claro durante su declaración judicial: "Ofreceríamos una experiencia realmente increíble" si la IA se integrara con Chrome. Según explicó, esto permitiría mostrar cómo luce una experiencia de búsqueda basada en IA de primer nivel.
OpenAI quiere independencia y dejar de depender de terceros
Actualmente, OpenAI colabora con Microsoft, utilizando Bing como base para las búsquedas dentro de ChatGPT. A través de su infraestructura en la nube, Azure, y el navegador Edge, han logrado una integración funcional. Sin embargo, Turley subrayó en el juicio que este modelo no está exento de fallos, haciendo alusión a su "Proveedor nº1″, cuya calidad de resultados de búsqueda considera problemática.
Por ello, OpenAI se ha fijado como meta que ChatGPT dependa en un 80 % de su propio motor de búsqueda para finales de este año, aunque reconocen que ese objetivo realista aún está a años de distancia. En ese camino, ya intentaron obtener acceso al índice de búsquedas de Google en 2023, pero la solicitud fue denegada.
Con la posible adquisición de Chrome, OpenAI podría cerrar esta brecha tecnológica y avanzar en su plan de crear un “super asistente de IA”, capaz de brindar respuestas más precisas, actualizadas y contextualizadas, sin depender de socios externos.
Google y Samsung, una alianza que bloquea nuevos competidores
En paralelo, OpenAI ha intentado también posicionar su tecnología en dispositivos con sistema operativo Android, en especial a través de acuerdos con fabricantes como Samsung. Sin embargo, según reveló el juicio, Google asegura esa exclusividad pagando sumas millonarias mensuales para que su aplicación de IA, Gemini, venga preinstalada.
Turley admitió que estos acuerdos excluyen a competidores como ChatGPT, limitando sus posibilidades de expansión. Esta situación refuerza el argumento de que el mercado de la búsqueda está dominado artificialmente, lo cual podría justificar legalmente la venta forzada de Chrome.
Si se concreta esta posibilidad, OpenAI está listo para dar el salto, buscando integrar su inteligencia artificial directamente en un navegador propio. Una jugada que cambiaría por completo el ecosistema de navegación y búsquedas en internet, y que reforzaría su ambicioso objetivo de convertirse en el nuevo estándar de interacción digital.