Un nuevo espacio celebra la belleza y la educación ambiental
Santiago de los Caballeros se llena de fragancia, color y vida con la inauguración del Orquideario Vivian Saladín de Guzmán, un rincón vibrante y armónico que ya forma parte del alma del Jardín Botánico Profesor Eugenio de Jesús Marcano.
Este nuevo espacio, que calificaron como el más grande y vistoso orquideario del Caribe, no solo embellece el jardín, sino que representa un compromiso firme con la conservación de especies y la educación ambiental inclusiva.

La ceremonia de apertura fue un acto cargado de emociones, encabezado por el presidente del Consejo de Administración, Juan Arias Fuentes, y acompañada por directivos, colaboradores y representantes de instituciones aliadas.
El orquideario, cuidadosamente diseñado para replicar el hábitat natural de las orquídeas, fue bendecido por Monseñor Héctor Rafael Rodríguez, Arzobispo Metropolitano, antes de un recorrido guiado que permitió a los asistentes maravillarse con la floración en vivo de estas joyas vegetales.
La conservación de la biodiversidad es también una experiencia multisensorial
Más que un jardín, el nuevo orquideario se erige como un aula viva: un espacio abierto para talleres, exposiciones y programas educativos que permiten a estudiantes y visitantes conectar de manera directa con la riqueza natural del Caribe.
El proyecto ha sido posible gracias al apoyo de la firma Guzmán Ariza, en honor a Vivian Saladín de Guzmán, cuyo legado inspira esta fusión entre ciencia, arte y comunidad.

Uno de los momentos destacados del acto fue la firma de un convenio internacional de cooperación con el Jardín Botánico Lankester de Costa Rica, lo que abre las puertas a nuevas investigaciones conjuntas y estrategias compartidas para proteger la flora regional.
Este espacio, que alberga especies nativas, endémicas y exóticas, cuenta con pérgolas, troncos, cascadas y microhábitats que recrean fielmente las condiciones ideales para el desarrollo de orquídeas. Su valor ornamental se potencia con un enfoque de participación ciudadana, educación y vínculo con las tradiciones locales.
Un nuevo punto de encuentro para la ciencia y la contemplación floral
El orquideario ya se integra a los espacios más queridos del Jardín Botánico, como el mariposario, el laberinto vegetal, y el humedal demostrativo, todos diseñados para promover el respeto por la naturaleza.
Este mismo fin de semana se celebra allí el “Festival de Orquídeas y Tradiciones”, consolidando la iniciativa como un motor de cultura ecológica en la región.
El Jardín de Todos, como se le conoce, continúa expandiendo su misión de bienestar colectivo, fomentando un vínculo más profundo con la tierra y con los saberes ancestrales que florecen en cada pétalo.
El Orquideario Vivian Saladín de Guzmán es, desde ahora, un símbolo vivo del poder transformador de la belleza y el conocimiento.