El presidente dominicano viajó con una delegación oficial para honrar al Sumo Pontífice
Santo Domingo.– Con paso solemne y el respeto que merece una figura de talla global, el presidente Luis Abinader partió este viernes hacia el Vaticano para rendir honores al difunto Sumo Pontífice, el Papa Francisco. Acompañado de la primera dama, Raquel Arbaje, y una comitiva oficial, el mandatario dominicano se unirá a líderes mundiales en la emotiva misa fúnebre que se celebrará este sábado 26 de abril en la majestuosa Plaza de San Pedro.
El avión presidencial despegó a las 10:00 de la mañana desde la Base Aérea de San Isidro, donde altos mandos militares, encabezados por el ministro de Defensa, Carlos Antonio Fernández Onofre, despidieron al jefe de Estado. Entre los presentes también destacaron el subcomandante de la Fuerza Aérea, Manuel García Lithgow, y los comandantes de la Guardia Presidencial y del Regimiento de la Guardia de Honor, Guillermo Caro Cruz y Paula Fernández Jiménez, respectivamente.
La delegación dominicana, que incluye al presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, y a la asistente presidencial Mercedes Pichardo, aterrizará en Roma en la noche previa a la ceremonia. Allí, se reunirán con el embajador designado ante la Santa Sede, Víctor Suárez, para participar en un acto histórico que congregará a dignatarios de todo el mundo.
El funeral del Papa Francisco, marcado por su legado de humildad y diálogo global, será un momento de reflexión y unidad. Tras la ceremonia, Abinader y su comitiva regresarán a República Dominicana el domingo 27 de abril, cerrando un viaje que refuerza los lazos entre la nación caribeña y el Vaticano.
Este gesto diplomático no solo honra la memoria del Pontífice, sino que también proyecta el compromiso de la República Dominicana con los valores de paz y solidaridad que él encarnó.