Siguiendo su voluntad, no habrá actos de velación informaron su hija Ninón y su exesposo, el doctor Manuel Matos Moquete
La República Dominicana despide a una de sus mentes más lúcidas. La maestra, urbanista y geógrafa Amparo Chantada falleció en la noche de ayer, tras sufrir un accidente cerebrovascular. Fue asistida de inmediato por su hija, la médico Ninón Matos Santana, quien intentó trasladarla al Centro Médico UCE, pero lamentablemente Chantada perdió la vida en el trayecto.
Natural de Orán, Argelia, nacida en 1945 de padres españoles refugiados, Chantada forjó su vida académica en Francia antes de establecerse en República Dominicana en 1978. Su adopción del país fue total: aquí formó familia, enseñó, investigó y se convirtió en una de las voces más respetadas en temas de urbanismo, geografía y medio ambiente.
Aportes a la educación, la geografía y el urbanismo dominicanos
Doctora en Geografía Humana y Ordenamiento Territorial por la Universidad París I Sorbona, Chantada dedicó más de tres décadas a la enseñanza en instituciones como la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) e INTEC. También fue fundadora y directora del Instituto de Urbanismo de la UASD entre 1997 y 2014.
Su producción intelectual abarcó libros fundamentales como La geografía en Santo Domingo, Planificación urbana de Balaguer 1986-1992, Mis años de lucha ambiental y Didáctica de la geografía para profesores de sociales. Además, fue reconocida con el Premio Nacional de Ensayo en dos ocasiones (1987 y 1993) y el Premio Nacional de Didáctica en 2006.
Consultora para organismos como el PNUD, FAO y PMA, Chantada trabajó en proyectos de gran impacto como el desayuno escolar en la zona fronteriza y estudios de impacto ambiental en Pueblo Viejo, Cotuí.
Una vida dedicada a la crítica, la escritura y la acción comunitaria
Amparo Chantada también fue una prolífica escritora y polemista. Durante décadas escribió artículos y ensayos en el diario Hoy, manteniendo un espíritu crítico y comprometido con las causas sociales y ambientales.
Fue cofundadora de Ciudad Alternativa y presidió en tres ocasiones la junta de vecinos del ensanche Lugo, evidenciando que su labor no se limitaba a las aulas o los libros, sino que se extendía a la acción directa en su comunidad.
Siguiendo su voluntad, no habrá actos de velación. Su hija Ninón y su exesposo, el doctor Manuel Matos Moquete, confirmaron que así lo había solicitado Amparo: una despedida sobria, como fue su estilo de vida.Su obra y su ejemplo quedarán como faro para las futuras generaciones de urbanistas, geógrafos y defensores del medio ambiente en República Dominicana.